Un día más en nuestra Cáritas Parroquial “los cuatro Evangelistas”.

Últimamente he escuchado el refrán “no es oro todo lo que reluce” y que verdad más grande. Hay momentos a los que la sociedad no le da importancia, hacemos recuento de lo que donamos y lo soltamos (meras cantidades…) y sin embargo, no todo es eso.

Detrás de cada foto y cada memoria con kilos y kilos de productos donados, hay un trabajo y un esfuerzo por parte nuestra y de otros voluntarios, al fin y al cabo, de personas sensibilizadas.

Acudir a limpiar, ordenar, clasificar productos según tipo y fecha de caducidad, escuchar los problemas y preocupaciones de personas que pasan por una situación complicada, empatizar, llevarte a casa esos problemas que no te corresponden, pero que sabes que hasta que no encuentres una solución, no vas a estar tranquilo…

El trabajo que realizo y realizamos todo un equipo en Cáritas y en la Caridad de una Hermandad, es mucho más de lo que se ve, que solo es el pico de la montaña. Es un esfuerzo diario, un quebradero constante de cabeza, es estar mano a mano con la desesperación, con problemas realmente importantes, con problemas de verdad.

Le damos valor a las situaciones por las que pasan las personas que nos rodean, le damos el valor que tienen y nos dejamos de banalidades superficiales.

Hoy quiero AGRADECER a todas las personas que comparten su tiempo, que se dan a los demás. Que luchan incansablemente por un mundo más justo, compartiendo problemas de verdad.

Palabras de la Diputada de Caridad.

#miercolesdelacofradiadedolores
#lacaridadnopara #dartealosdemaseslomejorquetepuedepasar
#gracias